Las burbujas son permanentes en estos tiempos. Hay demasiadi dinero en circulación y demasiada gente que tiene que justificar sus ingresos con altas rentabilidades. Por otra parte, como Galbraith nos enseñó, para que haya una burbuja solo hacen falta tres cosas. La primera es que algun listo crea que ha dado con la idea genial que permite que el precio de un valo crezca hasta el infinito, la segunda que haya suficiente gente que se lo crea, y la tercera la sempiterna falta de memoria de la gente. Como la anterior burbuja punto.com se llevó por delante la mitad de nuestra industria, a lo mejor es que nos merecemos que desaparezca la otra media.
La "idea genial" está ahí: crea algo 2.0 que promueva lo social.
Que alguien se lo crea está ahí con la valoración de Facebook por parte de Google en 15.000 millones de dólares.
Y la falta de memoria de la gente es algo inherente a la humanidad.
Así que creo que sí que podríamos asegurar sin temor a equivocarnos que vivimos otra gran burbuja. No obstante, la media industria que quedó ha crecido enormemente y no sería tan dramático perder otra mitad.
2 comentarios:
Las burbujas son permanentes en estos tiempos. Hay demasiadi dinero en circulación y demasiada gente que tiene que justificar sus ingresos con altas rentabilidades.
Por otra parte, como Galbraith nos enseñó, para que haya una burbuja solo hacen falta tres cosas. La primera es que algun listo crea que ha dado con la idea genial que permite que el precio de un valo crezca hasta el infinito, la segunda que haya suficiente gente que se lo crea, y la tercera la sempiterna falta de memoria de la gente.
Como la anterior burbuja punto.com se llevó por delante la mitad de nuestra industria, a lo mejor es que nos merecemos que desaparezca la otra media.
La "idea genial" está ahí: crea algo 2.0 que promueva lo social.
Que alguien se lo crea está ahí con la valoración de Facebook por parte de Google en 15.000 millones de dólares.
Y la falta de memoria de la gente es algo inherente a la humanidad.
Así que creo que sí que podríamos asegurar sin temor a equivocarnos que vivimos otra gran burbuja. No obstante, la media industria que quedó ha crecido enormemente y no sería tan dramático perder otra mitad.
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