miércoles, 26 de febrero de 2014

Apuntes sobre el "estado" de la Nación

¿Qué se le puede decir a una clase política empeñada en confundir sus problemas con los nuestros?

Ellos piensan en elecciones y nosotros en como sobrevivir. Para ellos el horizonte son cuatro años. Para nosotros es nuestra vida. Para ellos solo hay corto plazo. Para nosotros el futuro de nuestros hijos.

No es posible el entendimiento.

Y ellos a lo suyo que es pelearse entre facciones interesadas solo en comerse el pastel del poder y machacar a los que quieren también una dentellada del dulce manjar.

Dice Rajoy que ya hemos salido de la crisis.

O sea que hemos bajado al nivel octavo de la mina utilizando el ascensor y como hemos tocado suelo de roca, y hemos parado, ¿eso quiere decir que hemos salido?

Lo que estamos haciendo es ascender penosamente por la escalera de emergencia, y ahora miramos para arriba y nos parece ver un reflejo de la luz del exterior.

Pero seguimos en la mina, y vamos a estar en la mina muuuucho tiempo.

Mientras Rubalcaba dice que el gobierno maltrata a los ciudadanos.

¿Y como piensa el ilustre calvo que se puede salir de la mina? ¿cargados de deudas? ¿aumentando el déficit? ¿dando cinco mil millones cada año a las ONG? ¿naturalizando a los africanos que saltan la valla para pedir limosna a la puerta de las tiendas?

¿Qué propone Rubalcaba? Efectivamente...nada.

¿Y los catalanes? ¿dialogo para hacer lo que les de la gana y que ya han decidido hace años?

¿Y los vascos? ¿cuchufletas a los terroristas para organizar su salida de la cárcel y aquí no ha pasado nada?

Mientras, en Ucrania los "demócratas" siguen a lo mismo que en 1942 y ya han comenzado a atacar a los judíos y a los comunistas. (La cabra tira al monte).

Telefónica, o sea Alierta, hace otra reorganización y va rotando a sus delfines para que no se aburran...y no conspiren contra él.

En Italia tienen a un nuevo "premier",...que se parece enormemente a ¡Zapatitos!

Y en Méjico "detienen" al jefe del cartel de Sinaloa en lo que parece más una operación para protegerle que para castigarle. ¿Jubilación anticipada?

Hoy siguen en el Congreso con sus bobaditas. Menos mal que esta noche juega el Madrid. 

domingo, 23 de febrero de 2014

Buen rollito

El Presidente de Coca Cola España, Marcos de Quinto, va de tio guay.

Cuando le hacen entrevistas en la radio siempre sale a colación que tocaba en una banda de joven o que se va de rally y de aventuras varias siempre que sus obligaciones le dejan.

Como Coca Cola es también una empresa guay, todo encaja de maravilla...o encajaba hasta que la empresa que agrupa a las embotelladoras ha tenido que hacer un ERE.

Entonces, de Quinto, a preguntas de los pérfidos reporteros, manifestó que "esa empresa no era su empresa y ese ERE no era su ERE".

¡Que listo y que guay es de Quinto!

Yo no tengo nada que objetar a los ERE. Es más se positivamente que son necesarios en un mundo que va más deprisa que lo que se puede arreglar con retoques pequeños.

La tecnología, los vaivenes del consumo y la competencia, destruyen constantemente toda esperanza de estabilidad en el empleo, y si los directivos quieren que sus empresas sobrevivan tienen que andar en los terrenos de la cirugía mayor y sus consecuencias en los trabajadores. Es lo que hay.

No hay que tener miedo a tomar esas decisiones ni andar pidiendo disculpas como si la tarea de gestionar una empresa fuese un delito y una tarea para malhechores.

Pero en el mundo de lo políticamente correcto y del buenismo, hacer lo que hay que hacer no tiene buena prensa.

Rápidamente los medios, y especialmente las televisiones te colocan a todas las horas las imágenes de los pobres trabajadores afectados por el ERE de turno, que lógicamente están cabreados y asustados, y acusan a sus antiguos empleadores de todos los males del mundo.

Y nadie dice lo contrario. Los gobiernos se ponen de perfil ante las movilizaciones sociales, y las fuerzas vivas de intelectuales y artistas se unen a las procesiones de los desamparados como una  muestra de su humanidad.

Y a esto juegan también empresarios como de Quinto, que quieren ser populares y simpáticos y aparecer como el empresario bueno en oposición al empresario malo que es el que despide y tal y tal.

Y que mejor que hacer empresas con solamente el cogollito del negocio y dejar que la chusma de los obreros estén el "otra empresa" que "no es la suya".

Lástima que la Coca Cola no pueda salir por el grifo del agua, y así nadie tendría que estar en una fábrica embotellándola y poniéndola en cajas para su distribución.

¡Entonces si que sería una empresa guay!

Como las declaraciones del Presidente de Coca Cola España se hicieron en el marco de un "encuentro por el empleo", habrá que pensar que de Quinto piensa que lo de los obreros no es empleo.

O por lo menos que "no es su empleo".

Baja de la nube muchacho y únete a la fila de los empresarios canallas.    

viernes, 21 de febrero de 2014

Una de teoría de la información

Muy a menudo me enfrento a noticias que me cuentan cosas que no me interesan. Otras me topo con informaciones que si que me interesarían...si quienes las han redactado o editado se hubiesen tomado la molestia de contextualizarlas y explicarlas.

En las televisiones o en las emisoras de radio, la falta de criterio a la hora de "transmitir" determinadas informaciones es palmaria.

En el caso de los sucesos de Kiev, la mayoría de las informaciones no solo toman partido descaradamente por una de las partes en litigio, los manifestantes, sino que se limitan a contar lo que sucede ignorando absolutamente el porqué sucede.

Ayer mientras veía un telediario, una de mis sobrinas manifestaba su consternación por lo que pasaba, o sea las imágenes de los tiroteos y los enfrentamientos, pero lo hacía de la misma forma en que hubiese reaccionado ante un fenómeno natural, es decir como si lo que sucede en Ucrania fuese fruto de un tsunami o una ciclogénesis explosiva.

Como se trata de una persona educada, me parece grave que incluso esos niveles de la población ignoren los elementos principales de un conflicto que además lleva ya meses en los medios.

Naturalmente una de las razones de esa percepción sesgada se debe a la tendencia tan generalizada en nuestra sociedad que es la de ignorar todo cuanto sucede más allá de nuestras fronteras, pero desde luego otra parte muy importante es responsabilidad de los medios de comunicación.

En primer lugar esos medios asumen sin crítica de ninguna clase la información que viene de una de las partes en conflicto.

Esto lo vemos cada día en las informaciones sobre Oriente Medio, donde por alguna razón difícilmente explicable somos a veces antiisraelies y antiamericanos. (Cuando se trata del conflicto árabe-israelí). Otras somos pro Arabia Saudí-USA. (Cuando se habla de las guerras civiles sunies-chiitas).

En el asunto ucranio, es como si la única fuente fuese la CIA.

En un país dividido históricamente en dos, (con varias regiones que van a su aire), no comprendo porqué los medios españoles han decidido que los occidentalistas, o sea los antiguos ciudadanos del imperio austro-húngaro, (que tan entusiasticamente recibieron a los nazis y participaron en las matanzas de judios), son los buenos. Y porqué los antiguos ciudadanos del imperio zarista, sobre los que cayó con la mayor violencia el ejército alemán son los malos).

Es evidente que las mismas fuerzas que dinamitaron la antigua Yugoslavia están ahora haciendo la misma labor en Ucrania.

Lo que pasa es que la Rusia post colapso de la URSS era una cosa, y la Rusia de Putin es otra.

Y los rusos no se están dejando intimidar ni en Siria ni en Ucrania.

En algún tiempo pasado la URSS tenía sus redes de comunicación y conseguía también colocar sus puntos de vista en los medios occidentales.

Hoy no es así. Aquí todo viene de la CNN o de AlJazeera.

Pero los medios españoles no tendrían porqué aceptar que ese el el Único Punto de Vista.

¿O si?
  

jueves, 20 de febrero de 2014

London´s calling

Me he acordado de esta célebre canción de los Clash estos días mientras veía las imágenes de las márgenes del Támesis inundadas por la serie de tormentas que han descargado en toda Europa Occidental desde comienzos de año.

Los Clash decían "Londres se ahoga y yo vivo junto al río", y eso mismo es lo que parece estar sucediendo, ante el pasmo de quienes no se creen que el cambio climático sea una realidad.

Yo tampoco lo sé, la verdad, pero cuando escucho y leo a James Lovelock, que dice que disfrutemos mientras podamos porque esto ya no tiene arreglo hagamos lo que hagamos, no dejo de hacer mis cálculos.

Dice Lovelock, que es nonagenario, que en veinte años la población del planeta podría haberse reducido en un ochenta por ciento, debido a las catástrofes, el frío, la falta de alimentos y las enfermedades.

Como yo soy sexagenario, me temo que tendría que contemplar el desastre, lo que no me hace mucha gracia, y a la vez como tengo tiempo libre me pregunto si no tendría que estar haciendo algo para prepararme, como esos americanos que se construyen refugios nucleares en sus jardines.

O tal vez, comprar una granja en un lugar alejado de las grandes ciudades, para tener al menos patatas y huevos de gallina, con que esperar el final.

O a lo mejor lo que tendría que hacer es gastarme los ahorros alegremente y luego que saliera el sol por donde quiera.

Lo malo de todo esto es que James Lovelock no es ningún imbecil ni un ecologista zumbado, y las cosas que dice suelen molestar a todo el mundo, ya que por una parte carga contra la industria por llenar la atmósfera de dióxido de carbono y por otra dice que las energías renovables son completamente insuficientes y que la única salida, (para los supervivientes de la crisis), es la energía nuclear, los alimentos transgénicos y la tecnología en general.

Como YouTube está llena de entrevistas con James Lovelock, yo os invito a que le escuchéis o le leáis, y después juzguéis.

Hoy viene un enlace en El Confidencial, al que yo no he podido acceder, con una entrevista reciente.

Yo la verdad es que tengo la sensación de que soy una rana en un puchero de agua que se va calentando.

¿Cuando habría que saltar?

      

lunes, 17 de febrero de 2014

Africa empieza en la valla

Antes de nuestra entrada en la UE se decía que Africa comenzaba en los Pirineos, y la derrota de los árabes en Poitiers después de invadir la península, así parecía confirmarlo.

Además, los españoles éramos morenos, cetrinos y salvajes, y en lugar de cultura teníamos garrotazos.

En esa época, el Mediterráneo parecía un obstáculo insalvable, y la otra orilla un lugar inaccesible.

Como prueba de lo lejos que estaba, se puede recordar que no se pudo socorrer a las guarniciones cercanas a Melilla cuando los rifeños cayeron sobre ellas hace ahora noventa años.

Y que decir de lo que había más allá del Sahara.

Eso era tierra ignota a la que se llegaba únicamente por barco y eso arriesgando mucho lo que no interesaba a casi nadie.

Esta mañana escuchaba que la frontera mediterránea es la más desigual del mundo, en términos de renta y de población. Y eso antes tenía una importancia pequeña.

Ahora se ha vuelto muy importante.

Todos sabemos la teoría de los vasos comunicantes.

Antes, entre ambos vasos había un tapón que era el desierto y luego el mar. Ahora ese tapón se ha disuelto. O mejor dicho se ha comenzado a disolver. Y hay dos huecos: uno lleva a España. El otro a Italia.

No hay más. Por el sur, Africa no lleva a ninguna parte. Por el oeste a las Canarias y la nada. Por el Este a los países árabes, o sea la esclavitud. Solo queda el norte, y ahí estamos nosotros.

La misma persona que decía lo de la frontera desigual, el ex-ministro Borrell, decía también que Africa es el continente con mayor crecimiento demográfico, y yo añado que gracias a nuestra miopía, aquel en que ese crecimiento tiene menos contrapesos tanto culturales como económicos.

Hoy podemos poner vallas con cuchillas y pretender parar la ola.

Mañana no será posible.

Dice el Ministerio del Interior que hay 30.000 africanos esperando cruzar. Son muchísimos más.

Esta madrugada han cruzado 150 la valla de Melilla. Estaban exultantes y lo celebraban como si hubiesen resuelto sus vidas con grandes gritos y cánticos.

Los que critican a la Guardia Civil, deberían comenzar a pensar en donde vamos a poner, primero a los miles, y luego a los millones que vendrán.

La peregrina idea de que tenemos que desarrollar Africa para que no vengan, no tiene ni pajolera idea de lo grande que es aquello y la cantidad de niños que nacen cada día en los hospitales de nuestras ONG.

¿Porqué no se los mandamos a Bill Gates para que los aloje en su casa?  

 

jueves, 13 de febrero de 2014

Los belgas

Los belgas son apacibles burgueses que comen estupendamente, tienen un chocolate fenomenal, inventaron las patatas fritas y su héroe literario se llama tantán, (aunque se escribe Tintín).

Viven en un país dividido por la lengua, cuya capital Bruselas, que está en la parte flamenca, habla mayoritariamente francés, y es la ciudad en la que se escuchan más conversaciones en todos los idiomas europeos cuando se va por la calle.

Además tienen unas cervezas espectaculares.

Como se aburren mucho, de vez en cuando surge de la bruma un asesino múltiple o alguna trama de oscuros perturbados sexuales, que nos dejan helados con sus maldades.

Y luego siguen a lo suyo que es aburrirse, comer bien, y pelearse entre ellos a ver si consiguen vivir sin tener que hablarse nunca.

Y luego nos sorprenden con sus cosas. Por ejemplo en estas últimas horas se ha comentado mucho que están empezando a expulsar a ciudadanos de la UE que no tienen trabajo, por ser "una carga para el estado".

Como se habla de personas que a lo mejor han estado trabajando allí durante más de veinte años, la cosa tiene su gracia.

Ya decíamos que en Europa la gente empieza a cabrearse, y ahora añado que se esta asustando, lo que es mucho peor.

Cuando la gente tiene miedo al futuro es cuando comienza a escuchar a los personajes como Adolf Hitler, o Artur Mas que viene a ser una versión tímida de aquel. (No sabemos si igual de criminal, eso se verá con el tiempo).

Si todos los estados de la Unión comienzan a expulsar a los extranjeros que no trabajan tienen bastante trabajo por delante, y además se va a organizar una buena porque la gente en la UE se estaba acostumbrando a pasar de un país a otro sin más.

Volver a los nacionalismos europeos es más que peligroso: es suicida.

Y sin embargo los belgas nos están señalando algo que resulta difícil de negar: o la UE va hacia delante o irá hacia atrás. O se crean mecanismos compensatorios para atender a parados transnacionales o enfermos itinerantes, o cada país comenzará a pedir "balanzas fiscales" como hacen los nacionalistas catalanes.

El tema debería ser debatido en nuestro país, donde tenemos muchos más parados extranjeros que en ningún otro estado miembro. Y para que vamos a hablar de los extranjeros enfermos.

Solo que aquí estamos dando marcha atrás en el asunto del aborto así que no tenemos tiempo para hablar de otras cosas.

Por cierto que los belgas también han legislado la eutanasia infantil, algo de lo que preferiríamos no hablar, pero que es un asunto tristemente crítico para las personas que tienen hijos inviables a una vida mínimamente normal.

Las dos cuestiones nos deberían poner ante la cuestión de ¿en que mundo queremos vivir?

Y no estaría demás que alguien comenzase a pensar en ello.      

miércoles, 12 de febrero de 2014

Votación secreta

Los diputados demostraron ayer, por si hacía falta, que les importa un pimiento la opinión de los ciudadanos y que lo que les define es el pesebre en el que pastan.

Como Mariano había designado horas antes a su procónsul en Andalucía con total independencia de la opinión de los militantes de la zona, los diputados habían escuchado el viejo mensaje guerrista: "el que se mueve no sale en la foto", y allí fueron como dóciles ovejitas al sacrificio balando mansamente según se iban retratando.

Allí las diputadas aplaudían como posesas como si todas fuesen de la Obra, que alguna también lo será. Y allí estaba el otrora progre Gallardón, transmutado ahora en monaguillo de la Conferencia Episcopal, sonriendo como un sacristán al que felicitan por la ornamentación de la iglesia tras la boda.

Si no les da vergüenza es porque no la tienen.

Claro que si no fuese por estas cosillas, ¿de que hablaríamos?

¿Tal vez de la "epidemia" de robos en los autobuses de Madrid?. ¿Tal vez de que ayer los ladrones de cable dejaron a oscuras la Plaza de Manuel Becerra y parte de la calle Alcalá?

¿De la lista de películas ganadoras de los Goya, cuya sola enumeración ya provoca bostezos?

¿Del referéndum canario para detener las prospecciones petrolíferas a 60 km de la costa cuando los marroquíes lo hacen tan solo unos km mas allá?

¿De los que protestan porque no permitimos que cientos de africanos indocumentados y furiosos quieran atravesar la frontera a la fuerza?

¿De los que no respetan los pasos de cebra ni los semáforos?

¿De Urdangarín a quien piden una condena como si fuese el mismísimo Landrú?

¿Del Atleti que se desinfla y del Barcelona que se desliza bajo el paraguas arbitral?

Si yo fuese director de periódico ahora mismo creo que sentiría también la tentación de inventarme las noticias como la del romance entre Obama y Beyoncé, porque desde luego eso aunque sea falso es mucho mas interesante que la constatación de la amarga realidad.

Yo de momento propongo que los diputados además de votación secreta dispongan de votación a distancia, o incluso que la deleguen en el jefe de la bancada correspondiente y se dediquen directamente y de lleno al robo y al pillaje, compitiendo para ello con los carteristas latinos y los robacable gitanos.

A lo mejor así nos divertimos todos un poco más, y comprendemos los entusiasmos de ayer noche en el Congreso.    

martes, 11 de febrero de 2014

El año que viene en...Sefarad

Doy la vuelta a la conocida plegaria hebrea, "el año que viene en Jerusalén", para poner en su contexto mas humano y trágico la decisión aparente del Gobierno Español de conceder la nacionalidad española a todos los que puedan acreditar un linaje sefardí, sin perder su actual nacionalidad.

Desde 1492, y ya ha llovido, se ha esperado con paciencia y sin mucha esperanza , esta noticia.

Si este gobierno toma esta decisión habrá entrado en la historia de probablemente la mayor villanía cometida colectivamente por nuestro pueblo en todo el tiempo de su existencia.

Hemos cometido barbaridades, crímenes, salvajadas. Pero expulsar a toda una comunidad indefensa o someterla a la bajeza de renunciar a sus creencias en nombre de la pureza racial y la unidad religiosa, eso tiene pocos antecedentes históricos.

Aunque Fernando de Aragón se justificase diciendo que lo había hecho para impedir males mayores en forma de los "progromos" que de tanto en tanto sacudirían otros países europeos hasta llegar a la "solución final" alemana, la expulsión fue una canallada que empobreció definitivamente a un país tan necesitado de inteligencia como el nuestro. Los resultados nos han estigmatizado durante siglos.

¿No hubiese sido mejor que Baruch Espinosa o David Ricardo hubiesen vivido en España?

Y sobre todo, ¿no hubiese sido mejor que los españoles nos reconociésemos desde el principio como una sociedad mestiza que es lo que somos, en lugar de pretender ser de una raza pura que nunca hemos sido?

Como dice un sefardí en El País de hoy, esto no repara el daño causado pero es un buen gesto. Un gesto que no puede hacer olvidar no solo los quinientos años de diáspora, sino lo que es más grave los quinientos años de desprecio a los descendientes de conversos, tan numerosos en nuestro país y que hasta no hace mucho vivían con el temor a que alguien "tirase de la manta".

Porque los que se fueron a Estambul o Salónica, a Ámsterdam o a Londres, vivirían lejos de su hogar pero en una situación de libertad mayor que los que optaron por quedarse y vivir bajo el yugo de la Inquisición.

A estos si que habría que darles una reparación histórica, y aunque hoy todos nos hayamos mezclado y seamos una sopa genética indescifrable, reponerles en el orgullo de llevar en sus venas la sangre de los perseguidos por ser quienes eran y no por haber cometido falta alguna.

Dice El País que hay 3,5 millones de sefardíes en el mundo, principalmente en Israel, y teniendo en cuenta lo riguroso que es el sistema de linajes judíos, la mayor parte cumplirán de sobra las condiciones que marque finalmente la ley. (No como los hispano americanos donde ha habido amplia manga ancha).

Yo, que solo tengo que mirarme al espejo para ver de donde vengo, me di cuenta hace años, viendo la película Annie Hall, que la familia de Woody Allen y la de mi madre eran como dos gotas de agua.

Me gustaría más que nada, ir hacia el pasado y descubrir las razones de ese parecido.

Mientras, y por una vez, me siento unido al gobierno de mi país.    

lunes, 10 de febrero de 2014

Los europeos se estan cansando

Estas elecciones europeas van a demostrar una cosa muy sencilla: los ciudadanos de la UE y aledaños nos estamos cansando.

Cansando de no tener horizontes más allá de la austeridad y de la pérdida de todos los derechos adquiridos tras la guerra mundial.

Cansados de una clase política incapaz de plantearnos alternativas.

Cansados de quienes quieren hacer de nuestras sociedades una especie de comunas hippies donde todo el que venga tiene que ser recibido.

Los últimos en pronunciarse han sido los suizos que han decidido, por un margen estrecho, que no quieren más emigrantes...de la UE.

Vamos que no quieren ni alemanes, ni ingleses ni franceses. (De los españoles y griegos ni hablamos).

En Holanda se quieren marchar de la UE y en los demás países de la Unión quieren cualquier cosa que nos saque de aquí y nos de un poco de vidilla.

Si ya el Parlamento Europeo es un circo, tras estas elecciones el hemiciclo va a parecer la representación del Rocky Horror Show.

No obstante nuestros políticos se afanan en preparar candidaturas que supongo están influidas por el deseo de tanto funcionario partidario de tener un sueldo fijo durante unos años aunque sea a costa de tener que participar en el desfile de los monstruos de Estrasburgo.

Allí, entre los que defiendan la lechuga francesa o la mantequilla holandesa, y los que quieran cerrar la UE a cal y canto enfrentados a los que quisieran que nuestras fronteras dejasen de existir y entrase Africa entera, nuestros diputados, protegidos por su desconocimiento oceánico de las lenguas extranjeras podrán dormitar apaciblemente, mientras digieren la excelente cocina belga y sus famosas cervezas.

Y los ciudadanos mientras seguiremos asistiendo atónitos al espectáculo de una burocracia que avanza al ritmo de los graciares intentando poner de acuerdo a personas que no representan a nadie y lo saben, y cuyos jefes nacionales les ordenan que mueran por cuestiones domésticas.

Los suizos, que ven lo que está pasando, han dicho la primera palabra: que no vayamos allí en nuestra huida.

Y mientras estos merluzos que nos "gobiernan" dicen que todo va a mejor.

Ya veremos a quienes votan los ciudadanos cabreados.   

domingo, 9 de febrero de 2014

Hilaridad

Desde que se perdió la decencia en España, o sea desde Carlos IV más o menos, las clase dominantes se han caracterizado precisamente por una desvergüenza descarada que viene a mostrar el desprecio que sienten por los ciudadanos de esta pobre nación y el sentimiento de impunidad que les rodea.

Para acompañar ese desprecio e impunidad, los poderosos se han rodado siempre de una corte de palmeros, que han hecho de la adulación y la abyección moral su profesión, y la forma más segura de llevar la comida a su mesa.

Cuando de vez en cuando surge alguien que pone en tela de juicio esa impunidad, o sea esa forma de vivir por encima de las leyes con que nos martirizan a los demás, el ejército de palmeros sale a la carga para defender a sus amos y hostigar a sus enemigos.

Y el populacho español, que se encuentra entre los más depauperados moralmente en el mundo, en vez de seguir a los que discrepan sigue vociferante a los señoritos, llevando a la hoguera a quien se ponga por delante.

En el caso de los Urdangarín, los mamporreros de la Casa Real se han puesto de tiros largos para defender a la Infanta Doña Cristina, con un fervor que recuerda a las procesiones del Rocío y otras manifestaciones de culto mariano, a las que por otra parte tan aficionado es el populacho.

Doña Cristina se ha convertido para los trompeteros borbónicos en una especie de Juana de Arco, llevada injustamente a los tribunales por un nuevo inquisidor que se atreve a tener a la criatura seis horas declarando, ¡como si la tal criatura tuviese algo que ocultar!

Seis horas de no sés y no recuerdos, que debieron poner al pobre juez instructor al borde del ataque de nervios.

Claro que ¿Quién le mandaría a él meterse en semejante berenjenal?

¿Y que decir de los abogados defensores encabezados por la momia de Miquel Roca Junyent, cuya sonrisa satisfecha no podría igualar el mejor abogado de la Cosa Nostra manteniendo la inocencia de Al Capone?

En resumen la tesis de estos malabaristas del derecho penal es que la Infanta "confiaba en el buen hacer de su marido", y no sabía nada de la procedencia de sus ingresos.

Todo esto para que lo sepamos los súbditos malhumorados es una cuestión de amor.

Vamos como lo de Juana la Loca y Felipe el Hermoso.

Lo malo para los ponentes, sus defensores y sus trompeteros es que el discurso que se han montado, seguramente obligará al juez a dar su brazo a torcer, (si no lo hace la que le va a caer encima ya se la puede imaginar viendo lo que sucede a los jueces que intentan probar la corrupción en el PP), pero no va a convencer a nadie con dos dedos de frente.

Esas señoras que adoran a sus esposos y no se enteran de los orígenes del dinero que entra en casa desaparecieron hace unos cincuenta años, si es que alguna vez existieron.

Y lo único que queda es una sensación de indignación.

O mejor dicho, de hilaridad. 

jueves, 6 de febrero de 2014

Creación de empleo

Ahora que se acercan periodos electorales y que el Gobierno de la Nación está en campaña para hacernos creer que hemos salido de la crisis, conviene que aclaremos alguno de los discursos que nos van a caer encima como nube de granizo.

Uno de esos discursos estomagantes es el de la "creación de empleo".

Dicen los tertulianos que el gobierno tiene ahora que concentrarse en la "creación de empleo". Dicen los políticos que van a crear x miles de empleos. Y todos nos creemos como papanatas semejante cuento chino.

El único empleo que se puede crear desde el gobierno es el llamado empleo público o el generado en torno a las "obras públicas".

O sea que el Gobierno puede "crear empleo" si convoca oposiciones a auxiliares administrativos para las AAPP, o si aumenta los efectivos de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, o si aumenta la plantilla de profesores públicos.

También si construye el AVE Barcelona-Soria, (que sería muy bonito y tendría mucho público), o si cambia la rotulación y señalización de las carreteras, (que falta haría).

Todo ello con nuestro dinero, ya que todo el dinero que utiliza el Gobierno para cubrir sus presupuestos, sale de nuestros lomos y carteras.

En el resto del empleo, lo único que hace el Gobierno es sumar y restar para confeccionar estadísticas, que cuando salen bien es como consecuencia de los cambios estructurales efectuados por el Gobierno, o de los proyectos novedosos propuestos por el Gobierno. (Depende del partido gobernante). Cuando salen mal las cuentas, la culpa es del Gobierno anterior, cuyos cambios estructurales o proyectos novedosos son la causa del deterioro del empleo.

Cada vez que algún político habla de la "creación de empleo", alguien tendría que decirle: ¡No por favor!

No hagan más funcionarios. No más profesores ni catedráticos. No más coroneles y generales. No más bomberos.

No coloquen a sus allegados en puestos de "libre designación". Ni hagan asesores a sus amiguetes.

¿Es que resulta tan difícil de entender que solo la actividad económica y sus necesidades crean empleo?

¿Y es tan difícil de entender que contra más dinero privado se pierda en los vericuetos de las AAPP, menos empleo se creará?    

lunes, 3 de febrero de 2014

La sociedad tutelada y sus miedos

La muerte de Philip Seymour Hoffman por presumible sobredosis de heroina vuelve a poner encima de la mesa la cuestión del consumo de estupefacientes y la responsabilidad de cada cual para hacer con su vida lo que le apetezca, aunque sea malo.

En primer lugar hay que recordar una vez más, que este magnífico actor no ha muerto como consecuencia de la heroína, sino como consecuencia de la cadena de suministro de ese producto y la falta de control sanitario sobre la misma.

La heroína no mata. Lo que mata son los productos que se la incorporan para "cortarla" y la dificultad
para modular la pureza de las dosis que cada consumidor se autodosifica.

La mayor parte de los problemas derivados del consumo proviene de la prohibición misma y de haber dejado este mercado en manos de criminales, cuya misión no es proporcionar un producto en buenas condiciones sino sacar dinero de donde sea.

Es posible que consumir heroína no sea un buen hábito. Seguramente es muy malo...a largo plazo. La cuestión es porqué hay gente que se empeña en que adultos con perfecto control sobre sus vidas tengan que tener hábitos saludables.

La prohibición de sustancias que generan placer solo responde a miedos ancestrales alimentados por una maquinaria de poder que se ha establecido sobre la base del dominio y la represión.

La creencia de que una sociedad de ciudadanos satisfechos sería una sociedad ingobernable está en la base de todos estos fenómenos represivos que cada vez resultan más ridículos.

El miedo a la libertad se ha instalado desde tiempos inmemoriales de la mano de religiones y sectas que aspiran a convertirnos en un ejército de súbditos acojonados deseosos de que el tránsito terrenal pase lo más pronto posible. Los poderosos quieren administrar la entrada al paraíso y restringirla a aquellos que sumisos se contenten con obedecer y rezar.

Y por alguna razón, estos poderes asocian placer y rebelión.

Y nada mejor para generar el antídoto al placer y su búsqueda que introducir el miedo en nuestras cabezas.

Miedo a todo aquello que produce satisfacción.

Y las drogas son el paradigma de todos los miedos.

Y no importa que nos atiborremos a drogas legales. Es nombrar la heroína y que se nos pongan los pelos de punta.

¿De verdad que sería tan catastrófico que se pudiese adquirir heroína en las farmacias como se compra Prozac?

¿Cuanta gente tiene que morir de forma absurda como Seymour Hoffman o Janis Joplin o tantos otros?

De verdad que no le encuentro explicación, si no es la de que el actual estado de cosas, (véase la película El Consejero), interesa mucho a los que mandan.