Uno de los temas más interesantes que agitaron el verano fue la compra de Tuenti por parte de Telefónica. De esta forma, la operadora más importante a nivel nacional, y una de las grandes fuera de nuestras fronteras, se hacía con una de las más destacadas iniciativas online surgidas en España en los últimos años. Conociendo el pasado de Telefónica en sus intentos de entrar en Internet (Terra, Lycos y, el más reciente, Keteke) el morbo ha estado servido desde el primer momento y los comentarios y opiniones al respecto pueblan la Red, muchas de ellas expresando un negro futuro para la Tuenti. Después de leer todo lo que he encontrado sobre el tema, aquí traigo a posteriori mis propias apreciaciones acerca la compra:
Primero de todo expresar mi total desacuerdo con toda la gente que habla de pelotazo. Tuenti tiene muchas horas y muchas noches de trabajo por detrás. Supieron subirse a la ola de las redes sociales cuando estaba arrancando y fueron capaces de adaptar al mercado español un modelo que estaba triunfando en EEUU. Es digno de elogio el crecimiento que ha tenido esta red social es nuestro país, haciendo las cosas bien y presentando lucha a las otras tantas que han surgido en los últimos años, con Facebook a la cabeza. Como en tantas otras aventuras de emprendedores han tenido una oportunidad de vender y han considerado que era el momento. Nada de pelotazo, sino recogida de frutos sembrados y cultivados.
En cuanto al precio, la verdad es que no soy capaz de apreciar si 70M€ por el 90% del capital es acertado o no. Lo que sí que veo es que para Telefónica, que tiene unos ingresos anuales de 60.000 millones y se acaba de gastar 7.500 en Vivo, no supone un gran desembolso por hacerse con un servicio que tiene potencial para ser clave en un futuro cercano.
Telefónica está dedicando muchos esfuerzos a evitar ser un mero conductor de bits, para ser parte relevante de la cadena de valor. La operadora quiere entrar en el negocio de los contenidos y en la actualidad aquellos creados por los usuarios tienen gran importancia. Ahora habría que plantearse qué es lo que está comprando realmente Telefónica. No es al equipo, pues la mayoría de ellos han recogido beneficios y salido. Únicamente 2 miembros del equipo fundador se han quedado por contrato, y tiene pinta de que saldrán en cuanto puedan. ¿Han comprado la tecnología? Tampoco lo creo pues con su gran capacidad financiera y de Sistemas es algo que podría replicar. Efectivamente, lo que nos queda es la comunidad de usuarios que Tuenti ha construido durante los últimos 4 años, formada por más de 8 millones de personas, la mayoría de ellos españoles.
Pero, ¿realmente será Telefónica capaz de encontrar sinergias o mejoras al modelo de negocio que justifiquen la compra? ¿Qué uso le puede dar la operadora a la red social? Si convierte la marca Movistar en el tema central de la red podría crear valor pero a la vez destruiría el pegamento que mantiene reunidos a los usuarios de Tuenti. También se comenta la posibilidad de crear una OMV bajo la marca Tuenti, enfocada en los jóvenes, u ofrecer productos y servicios exclusivos para los que dispongan de un perfil dentro de la red social. Sea como sea, lo que seguro que está comprando Telefónica es la información de 8 millones de jóvenes, grandes consumidores de móvil hoy y potenciales clientes del mañana. Pero yo me sigo preguntando, ¿es esto suficiente para justificar la compra? ¿Por qué no una colaboración o partnership?
La operadora va a encontrar problemas más allá de encontrar un equipo director que sustituya eficazmente las salidas producidas. Para empezar, ha comprado una empresa que aún no ha llegado al break-even (habría que ver cuánto quedaría para el punto de equilibrio, cuando recuperen todas las inversiones), y que basa sus ingresos en diferentes formatos de publicidad online. Telefónica compra conocimiento en este respecto, pero tendrá que aprender el negocio. Además, tendrá que lidiar con el inmenso crecimiento de Facebook, su principal rival, que ya cuenta con más de 400 millones de usuarios y supera en tráfico a Tuenti en España. Otra vez, Telefónica podría reorientar la red social y cambiar su esencia generalista; no competiría con Facebook pero estaría cambiando agresivamente aquello que compró.
Por su parte, Tuenti sí que se puede ver claramente beneficiada por la adquisición. Latinoamérica tiene mucho peso en las cuentas de Telefónica y estoy seguro de que supone un más que probable futuro paso en la expansión geográfica de la red social. Además, el poderoso músculo financiero de la operadora eliminaría de un plumazo gran parte de los quebraderos de cabeza actuales para la compañía.
En mi opinión personal, los grandes beneficiados de esta compra son los socios fundadores de Tuenti, que ven su esfuerzo y riesgo sobradamente recompensados, además de salir con un CV espléndido. Para Telefónica no lo veo tan claro y tengo gran curiosidad por ver cuáles son los planes que tienen en mente para sacar provecho de esta compra.
Primero de todo expresar mi total desacuerdo con toda la gente que habla de pelotazo. Tuenti tiene muchas horas y muchas noches de trabajo por detrás. Supieron subirse a la ola de las redes sociales cuando estaba arrancando y fueron capaces de adaptar al mercado español un modelo que estaba triunfando en EEUU. Es digno de elogio el crecimiento que ha tenido esta red social es nuestro país, haciendo las cosas bien y presentando lucha a las otras tantas que han surgido en los últimos años, con Facebook a la cabeza. Como en tantas otras aventuras de emprendedores han tenido una oportunidad de vender y han considerado que era el momento. Nada de pelotazo, sino recogida de frutos sembrados y cultivados.
En cuanto al precio, la verdad es que no soy capaz de apreciar si 70M€ por el 90% del capital es acertado o no. Lo que sí que veo es que para Telefónica, que tiene unos ingresos anuales de 60.000 millones y se acaba de gastar 7.500 en Vivo, no supone un gran desembolso por hacerse con un servicio que tiene potencial para ser clave en un futuro cercano.
Telefónica está dedicando muchos esfuerzos a evitar ser un mero conductor de bits, para ser parte relevante de la cadena de valor. La operadora quiere entrar en el negocio de los contenidos y en la actualidad aquellos creados por los usuarios tienen gran importancia. Ahora habría que plantearse qué es lo que está comprando realmente Telefónica. No es al equipo, pues la mayoría de ellos han recogido beneficios y salido. Únicamente 2 miembros del equipo fundador se han quedado por contrato, y tiene pinta de que saldrán en cuanto puedan. ¿Han comprado la tecnología? Tampoco lo creo pues con su gran capacidad financiera y de Sistemas es algo que podría replicar. Efectivamente, lo que nos queda es la comunidad de usuarios que Tuenti ha construido durante los últimos 4 años, formada por más de 8 millones de personas, la mayoría de ellos españoles.
Pero, ¿realmente será Telefónica capaz de encontrar sinergias o mejoras al modelo de negocio que justifiquen la compra? ¿Qué uso le puede dar la operadora a la red social? Si convierte la marca Movistar en el tema central de la red podría crear valor pero a la vez destruiría el pegamento que mantiene reunidos a los usuarios de Tuenti. También se comenta la posibilidad de crear una OMV bajo la marca Tuenti, enfocada en los jóvenes, u ofrecer productos y servicios exclusivos para los que dispongan de un perfil dentro de la red social. Sea como sea, lo que seguro que está comprando Telefónica es la información de 8 millones de jóvenes, grandes consumidores de móvil hoy y potenciales clientes del mañana. Pero yo me sigo preguntando, ¿es esto suficiente para justificar la compra? ¿Por qué no una colaboración o partnership?
La operadora va a encontrar problemas más allá de encontrar un equipo director que sustituya eficazmente las salidas producidas. Para empezar, ha comprado una empresa que aún no ha llegado al break-even (habría que ver cuánto quedaría para el punto de equilibrio, cuando recuperen todas las inversiones), y que basa sus ingresos en diferentes formatos de publicidad online. Telefónica compra conocimiento en este respecto, pero tendrá que aprender el negocio. Además, tendrá que lidiar con el inmenso crecimiento de Facebook, su principal rival, que ya cuenta con más de 400 millones de usuarios y supera en tráfico a Tuenti en España. Otra vez, Telefónica podría reorientar la red social y cambiar su esencia generalista; no competiría con Facebook pero estaría cambiando agresivamente aquello que compró.
Por su parte, Tuenti sí que se puede ver claramente beneficiada por la adquisición. Latinoamérica tiene mucho peso en las cuentas de Telefónica y estoy seguro de que supone un más que probable futuro paso en la expansión geográfica de la red social. Además, el poderoso músculo financiero de la operadora eliminaría de un plumazo gran parte de los quebraderos de cabeza actuales para la compañía.
En mi opinión personal, los grandes beneficiados de esta compra son los socios fundadores de Tuenti, que ven su esfuerzo y riesgo sobradamente recompensados, además de salir con un CV espléndido. Para Telefónica no lo veo tan claro y tengo gran curiosidad por ver cuáles son los planes que tienen en mente para sacar provecho de esta compra.
3 comentarios:
Estoy de acuerdo con el análisis y coincido en las conclusiones. Un abrazo!!!
Me alegro, pero me gustaría conocer un poco más de detalle de tu visión experta en la materia! :-)
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