martes, 13 de marzo de 2007

Omemo


No tengo muy claro si esto es ya es una lucha contra las imposiciones de la industria o simplemente la naturaleza humana de crear y buscar nuevas formas de libertad. Sea como sea, aquellos que persiguen a los usuarios de las redes P2P, como si de criminales se tratase, lo tendrán aún más difícil.

Hoy leo que Omemo es un proyecto español (¡por fin!), desarrollado por Pablo Soto, basado en las redes P2P, y tiene muy buena pinta. En palabras de su creador: "Omemo es un dispositivo de almacenamiento virtual distribuido basado en tablas de hash distribuidas." En vez de conectar usuarios directamente, la iniciativa consiste en crear un gran disco de almacenamiento virtual a partir de pequeñas porciones de discos físicos de los usuarios.

De esta forma se esperan conseuir grandes ventajas:
  • Velocidades tan rápidas como las de los FTPs.
  • Los archivos permanecen accesibles aunque el que los comparta se desconecte.
  • Se puede organizar y buscar en él fácilmente.
  • Se accede a él como si de una unidad más se tratara (desde O:, manteniendo toda la conexión de redes de forma transparente al usuario).
  • Es anónimo, tanto como para el que comparte como para el que accede al contenido.
Pero este sistema no estaría exento de problema. Así, a bote pronto, la posibilidad de alguien que se dedique a borrar todos los archivos o que se llene de spam o basura son dos factores que deberían ser controlados de alguna forma.

No obstante, el proyecto promete. Espero dos cosas: una, que salga adelante, aunque sólo sea por todo lo que se lo están currando. Y dos, que de una vez por todas las entidades pertinentes se den cuenta de que no se pueden poner puertas al mar. Nuevos modelos de negocio navegan a la deriva a la espera de ser capturados.

2 comentarios:

Antonio Cordón dijo...

Una solución ingeniosa y en la línea del anarquismo primitivista que impera en internet. Todo es de todos.
Lo cierto es que las regulaciones actuales y aquellas de las que se habla no comprenden la magnitud de los cambios que se operan en la sociedad.
Yo insisto. Hay que buscar formulas justas que permitan acceder a las creaciones, y remunerar a los creadores.
No comprarles villas en Miami, ni reactores privados.
Pero tampoco pasarse por el forro la propiedad privada, porque entonces atacamos el pilar mas importante de nuestra civilización, y cuando se quitan los pilares, el techo se hunde.

Álvaro Morejón dijo...

Sin duda es una iniciativa curiosa, pero no original.
Freenet (http://es.wikipedia.org/wiki/Freenet) es una iniciativa similar, bastante más antigua que tube la desagradable idea de probar hace algún tiempo.
Al igual que Omeno, permite almacenar contenidos distribuidos en los equipos de otros usuarios. Todo es anonimo y todo está encriptado, es imposible incluso leer los datos que se almacenan en tu propio equipo.
La parte desagradable llega cuando uno examina que contenidos requieren de tanta seguridad y anonimato.
Solo diré que exceptuando los contenidos en chino, pocas cosas habia dentro de la legalidad y la moralidad(y no me refiero a derechos de autor).
No se si los creadores de este tipo de sistemas estarán orgullosos del uso que se da a su obra, pero estos usos aberrantes de internet demuestran que la libertad absoluta que tantos reclaman no puede concederse jamas.