domingo, 2 de diciembre de 2007

Geolocalización

El GPS (Global Positioning System) es probablemente uno de los inventos más útiles que han aparecido en los últimos años. Basado en un proyecto que lleva el ejército estadounidense, el cual ha permitido su uso para fines civiles, ayuda cada día a miles de personas ha llegar a sus destinos.

Un elemento tan importante, del que empieza a depender todo el mundo, no puede dejarse en un solo par de manos. Por ello, la Agencia Europea está trabajando en su propio servicio, llamado Galileo, previsto para 2011. Si no hay retrasos, ya que la burocracia inunda y resquebraja cualquier proyecto europeo que trate de competir contra uno americano (el año que viene pondrán en marcha la tercera versión del GPS). La lucha Airbus - Boeing es otro claro ejemplo de este desfase.

Estos sistemas de localización se empiezan a integrar en los móviles. Este servicio sí que presenta amplias oportunidades comerciales: publicidad personalizada basada en la posición del usuario. Un caramelo demasiado suculento como para dejarlo escapar por parte de uno de los grandes de la publicidad de hoy en día: Google.

Dado que lo suyo no es el hardware, Google ha enfocado esta oportunidad desde el lado opuesto: el software. Mediante la nueva versión de la aplicación Google Maps para móviles, el usuario puede saber en tiempo real dónde se encuentra, con un margen de error entre 500 y 5000 metros.

Esta distancia es amplia, sobre todo comparada con el GPS que ofrece un margen entre los 15 y 100 metros. Sin duda no es un sistema que de momento permita indicarte claramente con instrucciones precisas cómo ir de un punto de origen a un destino, pero sí que vale para dar una visión orientativa de la posición en el mapa.

En este vídeo pormocional de Google se describe cómo funciona el servicio, explicación del mismo incluída:



El beneficio más obvio que obtiene Google es obvio, mayor personalización de la publicidad al receptor. Lo que visto desde cierta óptica también puede ser algo realmente útil para el mismo, cómo bien se describe en el vídeo.

No obstante siempre queda el tema de la privacidad y hasta dónde queremos que Google sepa de nosotros. Si usas sus servicios, ya conocen nuestro calendario, nuestros amigos, nuestras fotos y vídeos.... ¿queremos que sepan también donde estamos?

Mi opinión es la de siempre. Mientras Google me ayude a organizar mi información, estoy dispuesto a prestársela. Pero siempre intento tener cuidado de cuánto dejo a la vista. Al final, se trata de seguir los mismos parámetros que en el Mundo Real, pero en Internet.

1 comentario:

Antonio Cordón dijo...

La verdad es que ese tema que propones, o sea el de la privacidad en la era digital es muy interesante. Yo creo que si Ben Laden se puede esconder, es que los sistemas de detección, incluso los de los militares, no son muy precisos. Lo que tenemos que hacer es, por un lado no ser atractivos para los malos, y por otra mezclarnos con la multitud.
Asi han sobrevivido durante toda la historia las gentes inteligentes.