Después de haber leido varios centenares de novelas de misterio, crímenes y espionaje uno se cree que tiene alguna idea de como funciona ese mundo de que en España se conoce pomposamente como "los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado".
Uno se imagina que en un país en el que se juegan, por una parte, la guerra terrorista de los nacionalistas vascos, por otra, la ofensiva independentista de los nacionalistas catalanes, por otra, la gran guerra de los musuolmanes contra los occidentales, por otra, los movimientos sinuosos de los marroquies siempre con un ojo en Ceuta y Melilla y otro en Canarias y su plataforma continental, y finalmente los mil y un movimientos de las diversas mafias que han hecho de la costa española su refugio y centro de reuniones, (por no hablar de la invasión de los gitanos rumanos y otros movimientos nómadas), uno se imagina, digo, que esos cuerpos y fuerzas, estarán formados por profesionales de enorme altura y valor acrisolado, y que habrá un gran consenso entre las fuerzas politicas y los medios de comunicación para sostener tanta guerra secreta.
Después de leer a Le Carré uno quiere creer en los motivos patrióticos que al final afloran aún en las mas repugnantes intrigas y las elevan al ámbito de las luchas heróicas de antaño.
En España todo es basura.
Los policías parecen unos mangantes e inútiles mindundis que meten la pata hasta no poder más, los políticos unos tuercebotas cuyas estrategias tienen más que ver con Mortadelo y Filemón que con Homero, los periodistas unas hienas sedientas de la sangre de los oponentes políticos, y el público en general una tanda de bobalicones que se creen que la longaniza crece en los perales.
Lo hemos visto en el asunto de los GAL. Lo hemos visto en los atentados del 11M. Lo vimos en el golpe de Tejero. En el espionaje a políticos y banqueros. En los manejos de Mario Conde. El el videl de Bárbara Rey. Y ahora lo volvemos a ver en el llamado Caso Faisán.
Diversos cuerpos de policia compitiendo por joder al otro. Negociaciones de paz que se llevan a cabo en un bar. Periodistas sedientos de sangre. Tertulianos llamando a la guerra santa. Jueces metidos a vengadores.
Y en el banquillo los policias que se han jugado el bigote para defender a su país.
¡Que país mas raro es España!
martes, 17 de septiembre de 2013
La caza del faisan
Publicado por Antonio Cordón a las 11:16
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