domingo, 18 de diciembre de 2011

Adios a Irak

Estos días ha fallecido Christofer Hitchens, un escritor y polemista británico, que como otros de mi generación vivió los alborozos esperanzados de los sesenta y las sucesivas derrotas y claudicaciones que les siguieron.

Hitchens, de quien se han publicado estos días numerosas necrológicas se había convertido en un personaje controvertido en la vida intelectual anglosajona, (que sigue existiendo al contrario que el mundo "latino").

Entre otras polémicas terció en la que es seguramente la mas virulenta estos últimos años, es decir la de Dios y lo divino.

El libro "God is not Great", es su mayor aportación a la polémica, y como facilmente se puede deducir del título, Hitchens, como se suele decir, "no era partidario".

Y es que para este inglés nacido en el 49, la experiencia vivida le había llevado a la conclusión de que el mayor enemigo de la civilización es el integrismo religioso y que frente a esa corriente de pensamiento había que levantar una muralla.

A mi me resulta bastante familiar ese pensamiento que comparto y ratifico y que tanto me aleja de los "multiculturalistas" y "buenistas" que piensan que hay que respetar cualquier pensamiento y estilo de vida y que no hay ningun sistema superior a otro.

Creo que mucha gente de mi generación, la que ahora se encamina a los sesenta o ya ha comenzado a transitar por esa década, comparte la idea de que si que hay culturas superiores, y de que si que debemos defender aquello que consideramos superior de aquello otro que pretende atacarlo.

El relativismo zapateril es no solo una memez, sino que es una memez peligrosa.

Eso no quiere decir que estemos a favor de otras memeces igualmente peligrosas como las que quieren establecer una dicotomía entre el integrismo islámico y el cristiano.

No. Es que estamos en contra del integrismo. Punto.

Creemos que la democracia laica y humanista es un valor en si misma y que no podemos renunciar a pensar y a expresarnos con libertad por muy amenazado que está nuestro mundo.

¿Y que tiene todo esto que ver con Irak?

Pues que Hitchens fué desde un comienzo favorable a la invasión de Irak, lo que le valió toda suerte de críticas por parte de la izquierda y la enemistad de no pocos de sus antiguos amigos.

Le parecía que derrocar a un tirano merecía la pena.

Y también que impedir que las mayores reservas de petróleo del mundo cayeran en mano de los integristas era una necesidad que justificaba los sacrificios que indudablemente comportaría la operación.

Hoy vemos como los últimos contigentes del ejército americano abandonan Irak.

No es como cuando evacuaron la embajada en Saigón, con la gente colgándose de los patines de los helicópteros.

Se van desfilando, pero se van.

Y me temo que no dejan una situación mejor que cuando llegaron.

De hecho, el integrismo es mas fuerte que nunca y el poder iraní se extiende como una mancha de aceite, a través de las "revoluciones" árabes.

Desde la franja de Gaza a las calles de Damasco, y desde El Cairo hasta Bagdag, una sombra está cayendo sobre el mundo.

Y encima están a punto de tener la bomba atómica.

Para Hitchens, para mi, y para muchos de nuestra generación es terrible ver que clase de mundo estamos dejando a nuestros hijos.

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