lunes, 23 de julio de 2012

¡Que vienen los interventores!

Me llama una amiga ayer por la tarde y me dice que la acaba de llamar otra amiga que le ha asegurado que mañana (hoy), nos intervienen seguro.

Leo las páginas de los diarios digitales de la derecha o escucho las tertulias ultramontanas y todo el mundo habla de que el gobierno ha perdido la partida y anda como "pollo sin cabeza" haciendo tontunas a diestro y siniestro.

Aunque yo era muy joven, me acuerdo de la llamada "crisis de los misiles" que enfrentó a los USA de Kennedy con la URSS de Jrucheff, porque entonces también se decía que la guerra era "inminente" y todo el mundo sabía que se estaba "acuartelando a los reclutas" y que nos iban a comunicar "enseguida" donde estaban los refugios antinucleares.

Todavía estamos esperando.

Yo no se que excitación produce en la gente la amenaza de la amenaza, pero el caso es que como estamos tan aburridos, nos parece excitante hasta la bancarrota del país o la guerra mundial.

Y luego están los comentarios sobre los malos, que en este caso son los especuladores, y en el caso de la crisis de los misiles eran los comunistas, (¡vaya paradoja!), y los buenos que entonces eran los americanos, (que vendrían a salvarnos), y ahora es el BCE, que tiene que comprar nuestra deuda como sea.

Necesitamos verlo todo en esta perspectiva.

Nosotros mientras tanto no tenemos que hacer nada.

Los buenos ganarán, porque siempre ganan, y los malvados especuladores capitalistas resultarán vencidos y tendrán que retirarse a sus cuevas góticas como los malvados de Batman.

Y así conjuraremos el peligro de esos interventores bruselenses que vienen a mirar nuestras cuentas, porque...¡no se fían de nosotros!

Pero si nosotros no nos fiamos de nosotros tampoco.

¡Como nos vamos a fiar de los mismos que nos han traído hasta aquí!

De los que quieren cerrar la crisis sin acabar con las autonomías absurdas, con los municipios corruptos, con las universidades conejiles, y con las empresas de la mamandurria.

De los que no supieron parar la burbuja de la construcción cuando los precios ya eran ridículos y se había construido para varias generaciones.

De los que permitieron una emigración masiva de tercera división.

De los que decían que España iba bien, y los que decían que estábamos en la "premier league".

De los que ahora pretenden que paguen la factura los mismos de siempre, o sea los asalariados.

Si Marianito el corto no sabe ya que hacer tendrá que convocar elecciones o dejar que vengan los interventores de una vez.

A lo mejor así terminamos teniendo un gobierno decente.  

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