viernes, 28 de septiembre de 2007

Los pequeños son más rápidos

Mientras en Andorra ayer conducían el segundo apagón analógico europeo, en España un nuevo diario en formato analógico (en papel, vaya) salía a la calle.

Es curioso cómo la imprenta se resiste a la digitalización. Más bien, cómo el público de dicho formato se resiste. Personalmente, creo que la imprenta nunca morirá, pero bien es cierto que los periódicos están sufriendo graves descensos en venta en los últimos tiempos.

Por ello llama la atención que, en un mercado claramente en decadencia, un nuevo competidor salga a la luz. En este caso bajo la estrella de Mediapro, dueña en gran parte de la cadena La Sexta. Menudo "imperio" mediático se está creando Jaume Roures bajo la sombra del actual gobierno español. En fin, que fácil es remar a corriente de los que mandan.

Mientras tanto, en el pequeño país de Andorra daban por cerrada su etapa de emisiones analógicas televisivas, y se lo dejaban todo al mundo digital. Qué envidia. Cierto es que estas cosas son más fáciles cuando la población a "educar" es mucho más pequeña, pero qué envidia.

A nosotros nos quedan 4 años (ya veremos si no son más), una mayoría de la población a la que hay que convencer de las virtudes de la digitalización (no muchas a día de hoy, las cosas como son), y aún más gente que sigue prefiriendo información desfasada en forma de tinta sobre árboles muertos que la inmediatez de los digital.

Seguramente es un tema de conveniencia (convenience que dirían los anglo-parlantes); o falta de empuje por parte de los medios; o quizá de ambos. Otra vez la pescadilla que se muerde la cola....

Y mientras tanto, promocionamos lo analógico en el mundo de lo digital.