sábado, 10 de enero de 2015

Islamofobia

Hay un escritor francés, Michel Houellebecq, que se caracteriza por su oportunismo a la hora de elegir los temas de sus novelas y por su continua lucha contra lo políticamente correcto, que acaba de publicar en Francia y pronto en España una novela titulada "Sumisión".

Otro día hablaré de este escritor que de verdad merece la pena. Hoy lo que corresponde es hablar de islamismo y de lo que nos está pasando en nuestras adormiladas sociedades europeas.

El reguero de asesinatos cometidos por una célula de Al Queda-Yemen en Paris hasta la eliminación física de sus miembros, (si es que tal cosa ha sucedido y no quedan todavía otros militantes dispuestos a seguir matando), ha vuelto a dejar perplejos a los ciudadanos en plena época de rebajas.

Y naturalmente todo el mundo ha salido a decir la bobadita de siempre: los islamitas matan más en los países islámicos. El Islam es paz.

El buenismo y el multiculturalismo no están dejando el encefalograma plano.

Europa tiene un problema con el islamismo porque el Islam actual trufado de salafismo, es decir de pensamiento rigorista bendecido y financiado por los países del golfo pérsico, es una ideología completamente contraria a la civilización occidental.

El Islam en Europa no solo no se está "contagiando" de valores humanistas, sino que se está radicalizando como consecuencia de la falta de integración de las poblaciones de origen magrebí y turco emigradas al continente en estos últimos cincuenta años.

Gentes que en sus países de origen eran tibios practicantes, aquí se vuelven furibundos fanáticos.

Chicas que han nacido aquí y que deberían haberse incorporado a la vida "normal", se ponen el hiyab y están dispuestas a convertirse en novias de mártires o bombas vivientes. Chicos que deberían estar pensando en el futbol se ponen a pensar en pegar tiros a sus vecinos.

Chicos y chicas que han ido a la universidad se convierten en radicales feudales dispuestos al sacrificio.

No creo que sea solamente por la falta de oportunidades laborales.

Muchos otros chicos y chicas (cristianos), viven la misma situación y no se ponen a pegar tiros.

Así que habremos de pensar que el Islam tiene algo que anima al radicalismo y también que aparte las ideas existen dentro del Islam organizaciones que canalizan, animan, encuadran, financian y dirigen a los proto-mártires.

Porque estas cosas no pasan solas.

Basta ver el armamento de los asesinos de Paris para comprender que aquí pasa algo grave.

Nos dicen que se está vigilando las mezquitas.

No hace falta ser James Bond para saber que la mezquita de la M-30 esta financiada con dinero saudí.

¿Quién financia las demás?

¿Por qué se permite la transmisión y la práctica de valores antidemocráticos en el colectivo  islámico como si fuese lo mas natural del mundo?

Y no me refiero a  como se vive en los países islámicos (¿por qué hay países islámicos por cierto?), sino a como se vive en España o Francia.

Los buenistas y multiculturalistas nos dirán que es "por respeto".

La posición de la izquierda sobre estas cuestiones es vomitiva.

Cuando dice Houllebecq   que dentro de 20 años habrá un gobierno islamista en Francia aupado al poder por una coalición con las izquierdas esta poniendo el dedo en la llaga.

Cuando se dice desde el pensamiento políticamente correcto que el Islam es una religión de paz se está ocultando la verdad: no lo es actualmente.

Y hay razones mas que sobradas para que comencemos a decir basta a toda una serie de valores que son defendidos por sus seguidores.

El primero el de la sumisión de la vida pública a lo que dicen que dijo un profeta hace 1500 años.

     

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