La noticia de la compra de Skype por parte de Microsoft, y por la bonita cantidad de 8500 millones de dólares, debe de estar poniendo a estas horas los pelos de punta a más de uno, y es que una cosa era el programita de marras, por muy fácil que fuese de utilizar, y otra que sea una parte de la próxima versión del Windows, y que podamos utilizarla con solo hacer clik.
El negocio de las llamadas internacionales, ya muy tocado, va a entrar en barrena y tendrá que pasar a ser parte de las tarifas planas, como por otra parte es lo debido dado que en el mundo digital la distancia es un factor irrelevante.
Para Microsoft es una buena noticia ya que revitaliza su declinante estrella, y porque alrededor de este facilitador de llamadas podrá agrupar otros servicios y seguir en la batalla con los grandes buscadores.
Y naturalmente esta noticia pone una vez mas en evidencia que el viejo mundo de las telecomunicaciones está dando sus últimos suspiros, al menos en las redes fijas, y que es el mundo internet el que se impone.
La gran cuestión sigue siendo: ¿quién va a pagar las redes?.
El negocio de las llamadas internacionales, ya muy tocado, va a entrar en barrena y tendrá que pasar a ser parte de las tarifas planas, como por otra parte es lo debido dado que en el mundo digital la distancia es un factor irrelevante.
Para Microsoft es una buena noticia ya que revitaliza su declinante estrella, y porque alrededor de este facilitador de llamadas podrá agrupar otros servicios y seguir en la batalla con los grandes buscadores.
Y naturalmente esta noticia pone una vez mas en evidencia que el viejo mundo de las telecomunicaciones está dando sus últimos suspiros, al menos en las redes fijas, y que es el mundo internet el que se impone.
La gran cuestión sigue siendo: ¿quién va a pagar las redes?.
No hay comentarios:
Publicar un comentario