lunes, 22 de junio de 2009

La primera revolución 2.0

Los acontecimientos que están teniendo lugar en Irán en los últimos 10 días ponen la piel de gallina. Afortunadamente, diría yo, porque eso quiere decir que nos estamos enterando de lo que está ocurriendo en aquel (no tan) lejano país asiático. Así mismo, hemos de agradecer a las tecnologías de la información esta disponibilidad de acceso a las noticias. Ante la prohibición de la asistencia de medios internacionales, Internet está permitiendo a los habitantes iraníes, testigos y activos presenciales de los hechos, comunicar al mundo lo que está pasando.

Una de las consecuencias más impactantes de la nueva sociedad de la información e Internet ha sido la aparición del concepto de prosumer (prosumidor), la suma de consumidor y productor de contenidos. En esta etapa que vivimos todos somos prosumers, todos podemos aportar nuestra voz que puede ser escuchada en cualquier lugar del mundo, sin límite potencial de receptores.

La prueba más fehaciente de este fenómeno puede que sea la comparación de la situación actual con los eventos ocurridos en 1989 en la Plaza de Tiananmen, donde una masacre de estudiantes fue silenciada al mundo entero. Jamás se conocerá en su plenitud todo lo que ocurrió en aquellos días, apenas hubo nadie para contarlo. Ya se encargó el gobierno chino de que así fuera. Las diferencias con la revuelta iraní son más que evidentes, ya que esta vez existen diferentes alternativas para seguir la actualidad sin tener que recurrir a los medios tradicionales. Desde la Wikipedia, hasta sitios web, pasando por Twitter, las fuentes de información están ahí para todo aquel que quiera saber.

El gobierno iraní puede vetar a los periódicos y televisiones del mundo, pero, a pesar del fuerte empeño que pone, no puede restringir a todos sus habitantes para que no alcen su voz y cuenten su visión de lo que realmente está pasando. El gobierno iraní dirá al mundo que las protestas de la oposición se desconvocan, únicamente para que el pueblo lo niegue y reafirme su voluntad de seguir la lucha.

No se trata únicamente de que los internautas del mundo estén mucho más enterados de lo que pasa en Irán de lo que podría imaginarse, sino que toda esta información está creando un sentimiento de empatía y alineación para con las personas que allí viven. El gobierno iraní no sólo no ha conseguido que gran parte del mundo no se entere de lo que pasa dentro de sus fronteras, sino que ahora esa gran parte del mundo es abiertamente opuesta a ellos.

1 comentario:

Jose Ignacio Hita Barraza dijo...

Internet es un arma que nos dejaron tener sin que ellos previeran su magnitud, ya intentan quitárnosla y seguro que dentro de no mucho habrá problemas con esto, deberíamos defenderla a capa y espada porque es lo mejor que tenemos, el acceso a la información.