Diez años de gestión desastrosa

Eso dice Merkell que ha sucedido en España y que es la consecuencia de nuestros males presentes.

Que nos recuerden eso de la gestión desastrosa la verdad es que duele cuando se hace desde allende nuestras fronteras, pero ¡que gran verdad es!

La pena es que la Justicia española no sea capaz de detectar todos los "listos" que durante esta década surrealista se han forrado, y poderles quitar el dinero acumulado de formas indecentes o simplemente irreflexivas.

Si se pudiese recuperar ese dinero no estaríamos en las que estamos. Y mucho se encuentra en el entramado de poderes municipales, redes familiares y clientelares, que han convertido amplias zonas de España, la España urbanizable, en un lozadal de corrupción en el que hay miles, cientos de miles de personas implicadas.

Cierto que los responsables políticos deberían ser los primeros en pasar por los juzgados, pero creo que Hacienda debería hacer un esfuerzo por localizar los capitales cimentados en el ladrillo y la especulación, y confiscarlos sin mas.

Pero la noticia que me entristece mas hoy es el nuevo profit warning de Nokia, con el correspondiente despido de otros diez mil empleados cualificados y educados que pasan a engrosar en toda Europa las filas de los expulsados de las clases medias. ¿Hasta cuando va  a aguantar el sistema sin reventar?

La otro noticia que merece la pena ser glosada es el nuevo intento de matrimonio Telefónica/Prisa que intenta salvar al que pudo haber sido el gran grupo mediático español, o mejor dicho "en español".

La mejor oportunidad en este sentido se la cargó el "preclaro" político asturiano Alvarez Cascos cuando era ministro de Fomento, y organizó un tiberio que a punto estuvo de arruinar completamente las telecomunicaciones españolas, ante el entusiasmo de ese otro gran patriota llamado Ramirez.

¿Diez años desastrosos? ¿Solo?