Mentiras gordas, piadosas y ... estadísticas

Hemos asistido estos últimos días al sainete de la controversia entre la comisaria de la Unión Europea Vivianne Reading, que se ocupa de los asuntos de la Sociedad de la Información, y el Secretario de Estado español de Telecomunicaciones, Sr. Francisco Ros, a cuenta de si las tarifas móviles españolas son las mas caras de Europa, como dice Reading, o de las mas baratas como responde Ros.

Es una trifulca antigua, que se alimenta de la malísisma relación entre Reading y nuestro ministerio y CMT, a cuenta de el diferente criterio que ambas partes tienen sobre la cuestión de la competencia.

Nuestras autoridades que dicen que aquí hay muchísima competencia, y Reading que dice que aquí hay poquísima competencia.

Pero a lo que vamos que es el tema de las estadísticas.

Resulta que en los temas de los indicadores de la Sociedad de la Información, cada país mide los que le da la gana y como le da la gana, y luego lo envía a unas entidades que se encargan de hacer las comparaciones para luego publicarlas en bonitos informes.

A todos los políticos les encanta salir bién en las tablas comparativas, y viceversa.

No se trata de la realidad. Se trata de salir bién en la foto.

Hay países habilísimos para cocinar sus estadísticas, y para venderlas en Bruselas, como es el caso de Portugal, que siempre sale estupendamente, y hay países que nos vendemos fatal y quedamos siempre en la cola, para desesperación de los responsables.

Todos los años en la presentación del informe de la CMT, se nos dice que las cosas van a cambiar y que vamos a adaptarnos a los mas modernos sistemas de medición para mejorar nuestra posición y salir de la cola, y cada año la cosa sale fatal y además viene la Reading y nos saca los colores, con gran satisfacción suya y de algunos otros.

El problema es que mientras discutimos sobre como mejorar la estadística, otros países discuten sobre como tirar las nuevas info-estructuras de banda ancha de alta velocidad.

Me parece patético todo este barullo de las (mentiras) estadísticas, con tanta indignación (falsa), y tanta declaración (ostentórea, si, ostentórea), de nuestros políticos.

Lo que hay que hacer es invertir y tener un plan para España.

Si además alguien va a Portugal y les pregunta como hacen ellos las estadísticas, pués mejor.