martes, 2 de marzo de 2010

Pacto de Estado

Hablaba yo el otro día en este blog, de los planes de estabilización y pactos de la Moncloa, y de lo que yo pensaba que había que hacer, o sea hacer descender el "souffle" de precios y salarios que tanto ha crecido desde que entramos en el euro.

Supongo que como a mi, a otros también les parecería que el pacto de estado del que se hablaba iría en tan grave dirección, acompañada por medidas en torno a las pensiones y la flexibilización del mercado laboral.

Los que tal cosa esperábamos nos hemos quedado a cuadros leyendo la propuesta del gobierno, que vuelve a ser un catálogo de medidas menores, aderezado por las buenas intenciones que nadie duda pueda tener el gobierno.

Hace unas horas se conoció el documento y las reacciones no se están haciendo esperar.

Yo añado las mías a las cuestiones referidas a las infraestructuras de banda ancha, que eso si, aparecen en el documento justo antes de la industria agro-alimentaria.

La propuesta del gobierno es:

Incluir la banda ancha en el Servicio Universal para 2011.

Apoyar la colaboración público privada en los despliegues de infraestructuras de acceso y troncales. (Allá donde existan fallos de mercado).

Ayudar al despliegue de redes ultra-rápidas mediante una línea de crédito de 200 millones de euros.

Respecto a lo primero, da exactamente igual si no se define un umbral de lo que se considera banda ancha. Un mega no es banda ancha.

Respecto a lo segundo, estaría muy bien si hubiese mercado. Como no lo hay, no puede haber fallos del mismo.

Respecto a lo tercero, es enternecedor que se pretenda "apoyar" el despliegue mediante una línea de crédito de ¡200 millones de euros!

Las inversiones que se calculan para que la UE tenga unas infraestructuras de banda ancha ultra-rápida son de ¡300.000 millones de euros!

En Alemania se habla de 37.000 millones de euros, y en UK de 15.000 millones de libras.

Sin embargo recordemos que para arreglar aceras y poli-deportivos se regalaron 8.000 millones de euros en España.

Me parece que cualquier comentario resultaría además de redundante, desolador.

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