Voy a aprovechar este último post mío del año para tocar un tema candente, acerca del cual se está escribiendo mucho en los últimos días: la bautizada como Ley Sinde. Sinceramente, no creo que vaya a ser capaz de aportar mucho más de lo que ya han hecho distintas voces de un bando u otro, pero al menos voy a tratar de aclarar las cosas para aquellos lectores que aún tengan claroscuros sobre lo que está sucediendo.
Como siempre, y sobre todo tratándose de un tema donde hay 2 visiones tan encontradas, este se tratará de un texto bastante subjetivo, así que animo a leer más allá, que muchas palabras ha sido escritas sobre ello.
Dicho eso, empecemos, que va para largo.
Hecho: Internet ha cambiado el mundo y con él, muchas de las industrias, que han tenido/tienen que adaptar su modelo de negocio al nuevo contexto que nos rodea. Para bien o para mal. No se trata de algo bueno o malo. Es algo que es.
Hecho: estos cambios han afectado de manera directa a la industria audiovisual, que ha visto como la gente ya no quiere comprar CDs, ni DVDs, ni BlueRays. La gente cada vez más quiere tener el control de lo que ve, cuándo lo ve y cómo lo ve.
Hecho: un cambio en el paradigma industrial siempre conlleva la destrucción de puestos de trabajo. Y la creación de nuevos.
Hecho: en España, compartir ficheros no es ilegal. Numerosos jueces han dictado sentencia en ese sentido, por mucho que se empeñen ciertos intereses en ocultar esta realidad. Repito: descargar ficheros de Internet, no es ilegal en España.
Hecho: sí que es ilegal lucrarse de contenidos sobre los que no se tienen los derechos. Tener publicidad en una página web con enlaces para descargas, es ilegal, y la ley actúa como debe en esos casos. Sin ir más lejos, hace un par de días detuvieron a unas personas por este tema.
Hecho: una película descargada no supone una película no vendida. Habrá veces que sí y otras que no.
"Hecho": estas descargas hacen que menos gente vaya al cine y compre menos DVDs. No es algo demostrable, pero sí se intuye.
Hecho: el cine español recibe una subvención de 80 millones de euros al año. No comento los resultados, porque eso ya es opinión. El Museo Reina Sofía recibe una cantidad similar. A becas de investigación se destinan 12 millones.
Hecho: la Ley Sinde es una ley que tiene su origen en el lobby de la embajada estadounidense. Es una ley que se trató de aprobar sepultada dentro de un paquete de leyes. Es una ley que da poder a una Comisión dependiente del Ministerio de Cultura para decidir si en una web (la que sea) se están vulnerando derechos de propiedad intelectual y poder cerrarla sin pasar por un juez. Los defensores dicen que el objetivo es poder acelerar los tiempos para cerrar esas páginas que ganan dinero sin tener derechos. Los detractores dicen que eso supone atentar directamente contra la libertad de expresión, porque por mucho que digan que sólo van a ir contra unas páginas, pueden ir contra cualquiera. La mía o la suya, sin ir más lejos. Y cerrarla sin juez de por medio.
Hecho: la Ley Sinde no se aprobó el martes pasado, en parte porque el PSOE no consiguió llegar a acuerdos con otros partidos, pero el Gobierno ya ha manifestado que lo volverá a intentar.
Hecho: creadores somos todos. Internautas somos todos. El País da voz a 22 creadores. Internet da voz a cientos de miles de creadores e internautas.
Hecho: España no es el país más pirata del mundo. Puede que lo sea Somalia. Tampoco es el país donde más descargas se producen, por mucho que los lobbies intenten hacernos creer lo contrario, poniéndonos en el punto de mira de las grandes mayors americanas.
Hecho: la música vive actualmente una edad dorada. Nunca ha sido más fácil hacer música y hacerla llegar al público. Lo que está en peligro es la industria as we know it. Al cine tampoco le va mal. En España la recaudación no ha hecho más que crecer en la última década.
Y ahora, mi opinión.
Estamos viviendo una guerra donde unos pocos ponen su voz en los medios y otros muchos tienen la voz en Internet. Se trata de una guerra que hace unos pocos años no se podría haber luchado, porque los muchos nunca podrían haberse hecho escuchar. Ese es el poder de Internet.
Estamos envueltos en una guerra donde uno de los "bandos" se empeña en argumentar falazmente a base de repetir que se trata de creadores vs. piratas o la lucha por el "todo libre" y la desaparición de la propiedad intelectual. Es un truco muy viejo, que persigue poner en tu favor a aquella gente menos conocedora del asunto. Por eso creo que es importante estar bien informado de lo que está ocurriendo.
Alejandro Sanz, uno de los artistas que más vehemente está defendiendo la Ley Sinde, habla de la dictadura de Internet, sin entender que precisamente lo que hace que la Red sea tan importante en su distribución inherente, su flexibilidad, su "falta de cabeza". Democracia, vaya. Siguen pensando con mentes del pasado.
Javier Bardem, otro del mismo lado, comete una falacia comparativa que me hace dudar. Si cree que la comparación es acertada, es más tonto de lo que pensaba. Si no lo cree, trata de crear confusión entre la gente. Mejor ser tonto. En todo caso, y en el caso de que existiese ese "botón tomatero", o el verdulero es capaz de diferenciar su tomate cultivado y cobrar por el un precio más elevado, o que se vaya buscando otro modelo de negocio. Así son las cosas.
Lo que no se puede permitir, es que el Gobierno subvencione modelos de trabajo del pasado a costa de los futuros, porque no es sino una manera de retrasar el avance de la sociedad. Así, únicamente se perpetua el pasado, que da réditos en el presente, pero entorpece de manera decisoria el futuro. Lo que hay que subvencionar es lo que viene, para que el cultivo dé el fruto del que vivir mañana.
Me aburro de leer que se están perdiendo puestos de trabajo únicamente por culpa de malvados piratas que intercambian archivos (como si la crisis que nos azota y el propio cambio en la demanda no tuviesen nada que ver). Habrá que preocuparse por toda esa gente que pierde su puesto a causa del cambio de modelo, mirar por que se puedan reciclar para entrar de nuevo en el mercado laboral. Pero lo que no se puede hacer es sostenerles artificialmente. Si la gente ya no quiere ir al FNAC a comprar CDs, pues habrá necesidad de menos dependientes. Pero seguro que Telefónica necesita más trabajadores para su servicio de música online. Se trata de trasvases en las necesidades laborales que han ocurrido durante toda la historia y que no deberían sorprendernos hoy en día. Caso a caso, se trata de una situación triste, porque todos somos personas. Pero viendo la foto global, es un cambio necesario para que cada uno de nosotros sea capaz de aportar valor a esta sociedad.
Alex de la Iglesia, presidente de la Academia de Cine Española, está resultado ser estos días una de las voces sensatas de ese bando. Si bien no estoy de acuerdo con todo lo que piensa y creo que se equivoca en bastante cosas, al menos es uno de los pocos que busca un diálogo. Defiende su posición (y su puesto), pero entiende que es necesario un cambio en el modelo.
Y es que las cosas han cambiado. Ya no escuchamos la música en CDs, sino en MP3. Cada vez queremos menos "poseer" las canciones o las películas, sino que preferimos el streaming. Queremos poder elegir contenidos antiguos, VO, subtítulos, alta definición, horario de emisión, repeticiones... Ya no nos vale el "café para todos". Esto es lo que demandamos y que la industria no nos quiere dar. Como siempre que ocurre una situación similar, esto ha dado lugar a un "mercado negro" (no estoy seguro de que sea una comparativa acertada) en Internet, donde la gente comparte a escala global las canciones que les gustan. Y no es que se trate de que todo sea gratis, como quieren hacer creer (o no quieren entender), sino que se espera un servicio que aporte un valor demandado.
Existen varias soluciones que se están demostrando como válidas a la hora de afrontar este escenario (Netflix, Spotify, iTunes, Hulu, Kindle...), pero a España apenas llegan. Y cuando llegan, lo hacen de manera restringida. Por ejemplo, iTunes no permite alquilar películas en VO por temas de derechos. Ese no es el camino.
Otra cosa que estoy oyendo repetidas veces estos días es que los verdaderos beneficiados de esta situación son las operadoras, que están ganando dinero por conexiones a Internet que la gente usa para las descargas. No estoy de acuerdo. Primero, porque pensar que la conexión a Internet sólo sirve para ver películas gratis es de una mentalidad tan simplista que lo único que demuestra es que quien lo piensa, efectivamente, sólo utiliza Internet para ver películas. Y segundo, porque el valor que se está diluyendo es el de la distribución de contenidos. Las redes siempre van a estar, escuche yo la canción en Spotify o la comparta con un amigo. En todo caso, no deja de ser curioso ver cómo las operadoras también se quejan de que su modelo de negocio no es producente...
Volviendo al tema inicial, creo que la Ley Sinde es un atropello que el PSOE ha intentando colar de tapadillo. Acostumbrados a un mundo en el que sólo se oían las voces que salían en el telediario, enfrentarse a un mundo donde cada ciudadano puede tener su propia voz, ha echado por la borda sus planes. Refuerzo de la democracia en España, nada de dictadura en la Red.
Realmente tengo muy poca esperanza en este país. Me cuesta ser optimista en este particular. Me cuesta creer que el PSOE no vaya a remover Roma con Santiago para lograr satisfacer al embajador americano y a los "artistas", que luego irán a hacerse la foto en tiempo de campaña. Si no es la Ley Sinde (que recordemos que se quita a los jueces de en medio porque no dictan lo que ellos quieren), será otra abominación similar. El Gobierno se está aprovechando del desconocimiento general que existe entre la población acerca de Internet para usarlo en su favor, buscando claramente el perjuicio de la sociedad española en su beneficio propio.
Y hasta aquí hechos y opinión. Seguro que me dejo muchas cosas en el tintero, pero creo que el texto es ya lo suficientemente largo. Por favor, leed más opiniones sobre este tema. Desde ambos puntos de vista. Espero que entre todas las lecturas os podáis hacer una idea de lo que está pasando y que sepáis contestar con criterio cuando os pregunten estas Navidades: y tú, ¿qué opinas de la que se ha organizado con las descargas de Internet?
Como siempre, y sobre todo tratándose de un tema donde hay 2 visiones tan encontradas, este se tratará de un texto bastante subjetivo, así que animo a leer más allá, que muchas palabras ha sido escritas sobre ello.
Dicho eso, empecemos, que va para largo.
Hecho: Internet ha cambiado el mundo y con él, muchas de las industrias, que han tenido/tienen que adaptar su modelo de negocio al nuevo contexto que nos rodea. Para bien o para mal. No se trata de algo bueno o malo. Es algo que es.
Hecho: estos cambios han afectado de manera directa a la industria audiovisual, que ha visto como la gente ya no quiere comprar CDs, ni DVDs, ni BlueRays. La gente cada vez más quiere tener el control de lo que ve, cuándo lo ve y cómo lo ve.
Hecho: un cambio en el paradigma industrial siempre conlleva la destrucción de puestos de trabajo. Y la creación de nuevos.
Hecho: en España, compartir ficheros no es ilegal. Numerosos jueces han dictado sentencia en ese sentido, por mucho que se empeñen ciertos intereses en ocultar esta realidad. Repito: descargar ficheros de Internet, no es ilegal en España.
Hecho: sí que es ilegal lucrarse de contenidos sobre los que no se tienen los derechos. Tener publicidad en una página web con enlaces para descargas, es ilegal, y la ley actúa como debe en esos casos. Sin ir más lejos, hace un par de días detuvieron a unas personas por este tema.
Hecho: una película descargada no supone una película no vendida. Habrá veces que sí y otras que no.
"Hecho": estas descargas hacen que menos gente vaya al cine y compre menos DVDs. No es algo demostrable, pero sí se intuye.
Hecho: el cine español recibe una subvención de 80 millones de euros al año. No comento los resultados, porque eso ya es opinión. El Museo Reina Sofía recibe una cantidad similar. A becas de investigación se destinan 12 millones.
Hecho: la Ley Sinde es una ley que tiene su origen en el lobby de la embajada estadounidense. Es una ley que se trató de aprobar sepultada dentro de un paquete de leyes. Es una ley que da poder a una Comisión dependiente del Ministerio de Cultura para decidir si en una web (la que sea) se están vulnerando derechos de propiedad intelectual y poder cerrarla sin pasar por un juez. Los defensores dicen que el objetivo es poder acelerar los tiempos para cerrar esas páginas que ganan dinero sin tener derechos. Los detractores dicen que eso supone atentar directamente contra la libertad de expresión, porque por mucho que digan que sólo van a ir contra unas páginas, pueden ir contra cualquiera. La mía o la suya, sin ir más lejos. Y cerrarla sin juez de por medio.
Hecho: la Ley Sinde no se aprobó el martes pasado, en parte porque el PSOE no consiguió llegar a acuerdos con otros partidos, pero el Gobierno ya ha manifestado que lo volverá a intentar.
Hecho: creadores somos todos. Internautas somos todos. El País da voz a 22 creadores. Internet da voz a cientos de miles de creadores e internautas.
Hecho: España no es el país más pirata del mundo. Puede que lo sea Somalia. Tampoco es el país donde más descargas se producen, por mucho que los lobbies intenten hacernos creer lo contrario, poniéndonos en el punto de mira de las grandes mayors americanas.
Hecho: la música vive actualmente una edad dorada. Nunca ha sido más fácil hacer música y hacerla llegar al público. Lo que está en peligro es la industria as we know it. Al cine tampoco le va mal. En España la recaudación no ha hecho más que crecer en la última década.
Y ahora, mi opinión.
Estamos viviendo una guerra donde unos pocos ponen su voz en los medios y otros muchos tienen la voz en Internet. Se trata de una guerra que hace unos pocos años no se podría haber luchado, porque los muchos nunca podrían haberse hecho escuchar. Ese es el poder de Internet.
Estamos envueltos en una guerra donde uno de los "bandos" se empeña en argumentar falazmente a base de repetir que se trata de creadores vs. piratas o la lucha por el "todo libre" y la desaparición de la propiedad intelectual. Es un truco muy viejo, que persigue poner en tu favor a aquella gente menos conocedora del asunto. Por eso creo que es importante estar bien informado de lo que está ocurriendo.
Alejandro Sanz, uno de los artistas que más vehemente está defendiendo la Ley Sinde, habla de la dictadura de Internet, sin entender que precisamente lo que hace que la Red sea tan importante en su distribución inherente, su flexibilidad, su "falta de cabeza". Democracia, vaya. Siguen pensando con mentes del pasado.
Javier Bardem, otro del mismo lado, comete una falacia comparativa que me hace dudar. Si cree que la comparación es acertada, es más tonto de lo que pensaba. Si no lo cree, trata de crear confusión entre la gente. Mejor ser tonto. En todo caso, y en el caso de que existiese ese "botón tomatero", o el verdulero es capaz de diferenciar su tomate cultivado y cobrar por el un precio más elevado, o que se vaya buscando otro modelo de negocio. Así son las cosas.
Lo que no se puede permitir, es que el Gobierno subvencione modelos de trabajo del pasado a costa de los futuros, porque no es sino una manera de retrasar el avance de la sociedad. Así, únicamente se perpetua el pasado, que da réditos en el presente, pero entorpece de manera decisoria el futuro. Lo que hay que subvencionar es lo que viene, para que el cultivo dé el fruto del que vivir mañana.
Me aburro de leer que se están perdiendo puestos de trabajo únicamente por culpa de malvados piratas que intercambian archivos (como si la crisis que nos azota y el propio cambio en la demanda no tuviesen nada que ver). Habrá que preocuparse por toda esa gente que pierde su puesto a causa del cambio de modelo, mirar por que se puedan reciclar para entrar de nuevo en el mercado laboral. Pero lo que no se puede hacer es sostenerles artificialmente. Si la gente ya no quiere ir al FNAC a comprar CDs, pues habrá necesidad de menos dependientes. Pero seguro que Telefónica necesita más trabajadores para su servicio de música online. Se trata de trasvases en las necesidades laborales que han ocurrido durante toda la historia y que no deberían sorprendernos hoy en día. Caso a caso, se trata de una situación triste, porque todos somos personas. Pero viendo la foto global, es un cambio necesario para que cada uno de nosotros sea capaz de aportar valor a esta sociedad.
Alex de la Iglesia, presidente de la Academia de Cine Española, está resultado ser estos días una de las voces sensatas de ese bando. Si bien no estoy de acuerdo con todo lo que piensa y creo que se equivoca en bastante cosas, al menos es uno de los pocos que busca un diálogo. Defiende su posición (y su puesto), pero entiende que es necesario un cambio en el modelo.
Y es que las cosas han cambiado. Ya no escuchamos la música en CDs, sino en MP3. Cada vez queremos menos "poseer" las canciones o las películas, sino que preferimos el streaming. Queremos poder elegir contenidos antiguos, VO, subtítulos, alta definición, horario de emisión, repeticiones... Ya no nos vale el "café para todos". Esto es lo que demandamos y que la industria no nos quiere dar. Como siempre que ocurre una situación similar, esto ha dado lugar a un "mercado negro" (no estoy seguro de que sea una comparativa acertada) en Internet, donde la gente comparte a escala global las canciones que les gustan. Y no es que se trate de que todo sea gratis, como quieren hacer creer (o no quieren entender), sino que se espera un servicio que aporte un valor demandado.
Existen varias soluciones que se están demostrando como válidas a la hora de afrontar este escenario (Netflix, Spotify, iTunes, Hulu, Kindle...), pero a España apenas llegan. Y cuando llegan, lo hacen de manera restringida. Por ejemplo, iTunes no permite alquilar películas en VO por temas de derechos. Ese no es el camino.
Otra cosa que estoy oyendo repetidas veces estos días es que los verdaderos beneficiados de esta situación son las operadoras, que están ganando dinero por conexiones a Internet que la gente usa para las descargas. No estoy de acuerdo. Primero, porque pensar que la conexión a Internet sólo sirve para ver películas gratis es de una mentalidad tan simplista que lo único que demuestra es que quien lo piensa, efectivamente, sólo utiliza Internet para ver películas. Y segundo, porque el valor que se está diluyendo es el de la distribución de contenidos. Las redes siempre van a estar, escuche yo la canción en Spotify o la comparta con un amigo. En todo caso, no deja de ser curioso ver cómo las operadoras también se quejan de que su modelo de negocio no es producente...
Volviendo al tema inicial, creo que la Ley Sinde es un atropello que el PSOE ha intentando colar de tapadillo. Acostumbrados a un mundo en el que sólo se oían las voces que salían en el telediario, enfrentarse a un mundo donde cada ciudadano puede tener su propia voz, ha echado por la borda sus planes. Refuerzo de la democracia en España, nada de dictadura en la Red.
Realmente tengo muy poca esperanza en este país. Me cuesta ser optimista en este particular. Me cuesta creer que el PSOE no vaya a remover Roma con Santiago para lograr satisfacer al embajador americano y a los "artistas", que luego irán a hacerse la foto en tiempo de campaña. Si no es la Ley Sinde (que recordemos que se quita a los jueces de en medio porque no dictan lo que ellos quieren), será otra abominación similar. El Gobierno se está aprovechando del desconocimiento general que existe entre la población acerca de Internet para usarlo en su favor, buscando claramente el perjuicio de la sociedad española en su beneficio propio.
Y hasta aquí hechos y opinión. Seguro que me dejo muchas cosas en el tintero, pero creo que el texto es ya lo suficientemente largo. Por favor, leed más opiniones sobre este tema. Desde ambos puntos de vista. Espero que entre todas las lecturas os podáis hacer una idea de lo que está pasando y que sepáis contestar con criterio cuando os pregunten estas Navidades: y tú, ¿qué opinas de la que se ha organizado con las descargas de Internet?
3 comentarios:
Completamente de acuerdo.
La industria debería hacer su propio análisis PEST para darse cuenta de que tanto su entorno como la tecnología han cambiado el mercado al que están dirigidos, y deben replantearse su modelo de negocio. Lo que no se puede es modificar las condiciones políticas para que todo siga como estaba. Así no avanzaremos nunca...
¡Bravo!
Muy buen artículo. Estoy de acuerdo en todo y me encanta cómo está escrito. Enhorabuena.
Sugerencia para otro post:
Consecuencias que podría tener la aprobación de la Ley Sinde al margen de las descargas. Ley Sinde vs libertad de expresión.
Me alegro de que os haya gustado :-)
El tema del daño que hace la Ley Sinde a la libertad de expresión se ha comentado mucho ya por la Red y no me veo con la soltura/conocimiento como para escribir sobre ello alegremente (triste tampoco :-P).
No obstante, ahora que ya está casi aprobada, sí que puede ser que me anime a escribir sobre las consecuencias generales.
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