martes, 4 de marzo de 2008

Necesitamos estándares


Hoy he comprado un teléfono fijo para casa. Al ser un aparato que uso más bien poco, da rabia gastarse el dinero en él. Es el tercero que compro en los últimos meses, previo descambio del anterior. Intentas ahorrar en la compra, y al final lo barato sale caro.... Pero ese no es el tema de hoy.

El punto es que me ha sorprendido encontrarme con 5 manuales de uso, distintos pero iguales. Las mismas instrucciones, en 5 idiomas distintos, a saber: español, portugués, francés, italiano y, por supuesto, inglés.

Aparte del considerable daño medioambiental causado a causa de la impresión de 5 libretos, existe el considerable coste redundante para el fabricante.

Y es que si queremos competir contra EEUU y las potencias emergentes de los países de BRIC (Brasil, Rusia, India y China), en Europa necesitamos estándares. La moneda única es un comienzo, pero más crítico me parece a mí la instauración de un idioma continental general y oficial.

Por supuesto, el inglés. Aunque sólo sea porque ya sea estándar práctico, porque se habla en EEUU y en gran parte del mundo, o porque es el idioma de los negocios y de la mayoría de los personajes más importantes de nuestro tiempo.

Podría ser cualquier otro idioma, pero yo abogo por el inglés. La obligatoriedad del aprendizaje de un mismo idioma común para toda Europa, tanto desde la infancia como para los más mayores, ahorraría muchos costes a nuestras empresas. Agilizaría las negociaciones entre países. Haría la vida más fácil al viajero. Permitiría disfrutar más al consumidor de contenidos. Sería una ventaja para todos.

Aclaro, para prevenirme contra los malpensados, que no creo en la abolición o marginación de los otros idiomas existentes. Propongo un extra, no una mutilación. El español, oficial es España; el inglés, oficial en Europa. Hablar 2 ó 3 idiomas nunca le ha venido mal a nadie.

Porque no es necesario tener 5 manuales distintos que contienen la misma información. Es un gasto de recursos para la empresa. Es un gasto de peso extra para el transportista. Es un gasto de espacio para mí.
Si queremos que Europa sea algo más que un incremento en los niveles de burocracia, necesitamos unificar los continentes, para que los contenidos discurran con mayor fluidez. Una economía común, unas políticas comunes, un idioma común.

1 comentario:

Antonio Cordón dijo...

El problema es que en España existe una pertinaz campaña para que además los manuales vengan en catalán, gallego y vascuence.

Desde las industrias, incluidas las catalanas, se lucha contra esta aberración, pero los políticos tienen demasiado dinero y demasiado poder.

Cada vez creo mas en pedir una bajada de impuestos del 80% como única forma de acabar con tanto cretinismo interesado.