LOS PROBLEMAS DE INTEL

Recientemente he leido que Intel está teniendo problemas con los analistas financieros. Sus márgenes no están a la altura que estos caballeros, normalmente muy jovenes, han marcado para la compañía. Como paradoja no está mal. La compañía cuyos productos están en el corazon de casi cualquier aparato electrónico no consigue masa crítica como para enfrentar a la competencia, y no es suficientemente rentable.

Esta situación debería llamar la atención de algun comentarista, pero pierdo el tiempo buscando. A nadie le llama la atención. La globalidad y el reino de los resultados trimestrales llevan a estas aberraciones. Ahora resulta que Intel no es rentable.

Llevamos años bajo esta tiranía de los resultados a corto y de la búsqueda de niveles de competitividad exagerados, que coartan el desarrollo, y trituran a las empresas en pos de unos resultados que exigen continuamente incrementar la cuota de mercado y mejorar el margen.

Cuando se trabaja en la órbita mundial, ¿que tendríamos que hacer?, ¿acaso ir a Marte?.

Mejorar el margen, se hace a base de reducir costes, o sea despedir a gente cualificada, o introducir ritmos de productividad rayanos con el paroxismo y el delirio. En último término se trocea la compañía y se vende por partes. ¿Es esto razonable?.

Dice un viejo proverbio sueco que no hay ningun arbol que pueda seguir creciendo hasta llegar al cielo, pero esto parece que no va con los analistas.