miércoles, 2 de abril de 2008

Europa quiere blindar su ciberespacio

Me ha hecho gracia esta noticia que hoy publica un diario, porque estaba escribiendo un artículo sobre las vías para desarrollar la sociedad de la información, o más bien desbloquear ese desarrollo, y naturalmente, yo pienso que una de las claves es precisamente dar con un marco legal que trascienda los límites, ficticios en el hiperespacio, de las fronteras.

Así que Europa quiere blindar su ciberespacio. Cómo si ese ciberespacio estuviese por arriba del espacio físico.

Se ve que para los que piensan estas cosas, el ciberespacio comparte con el cielo religioso esa caracteristica de estar como suspendido sobre nuestras cabezas.

Pero, en fin, es verdad que algo habrá que hacer para que el cibercrimen no campe por sus respetos.

Otra cosa graciosa es que en centro de la OTAN para la ciberdefensa está precisamente en Tallin, capital de Estonia, el primer país que ha sufrido un ciberataque despiadado desde la vecina Rusia, como represalia por el trato que los estonios dan a la minoria rusa en aquel país.

Pero lo que mas gracia me produce es la relación de los países que se oponena la firma de un tratado europeo de cibercrimen, y que son aparte Rusia, naturalmente, Georgia, Turquia y ¡Luxemburgo!

¡Que ocultarán en
el pequeño principado del Benelux!

Una de las propuestas del famoso tratado es la de que los proveedores de servicio estarían obligados a entregar a las autoridades una lista de los tipos de información que pueden ofrecer a sus clientes.

Y aunque no lo he leido mucho me temo que el control sobre los contenidos que circulan por la red, y quienes acceden a ellas, estará en la misma cesta.

Blindar el ciberespacio no creo que sea posible, pero meterse en nuestras casas seguro que si.

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